Antonio Vicente comienza en Elche con 23 años su camino en el mundo del calzado, “La Casita” será su primera fábrica.
En 1989 se graba por primera vez el sello de Panama Jack en unas botas. Empieza la aventura de la que formas parte.
Hoy, más que nunca, nos sentimos orgullosos de haber apoyado la producción local de cercanía desde el primer día, con los mismos talleres y el mismo cariño desde 1989.
En 1990 aparece por primera vez publicidad de Panama Jack en revistas y periódicos, se empieza a sentir el entusiasmo por la aventura.
Nuestros productos son para las pisadas más exigentes: materiales de primera calidad, que duran en el tiempo y que además son infinitamente cómodos.
Caminar con Panama Jack es formar parte de una historia de personas que persiguen hacer realidad sus sueños y hacen de su vida una aventura.
La bota Panama es la insignia de la marca, una bota genuinamente cómoda, atractiva y resistente. Aquí puedes ver cómo se fabrican paso a paso.
Ayudamos a hacer del mundo un lugar más justo, ayudando a quienes más lo necesitan, colaborando año tras año con la Fundación Un Abrazo de Luz y la Fundación Vicente Ferrer.
Formamos parte de toda una historia de expediciones y aventuras, como la Ruta Quetzal, excavaciones de la Fundación Atapuerca, viajeros anónimos… ¡Y todo lo que nos queda por descubrir!
Estamos orgullosos de nuestra producción local de cercanía de toda la colección, Made in Spain, desde el primer día. Nuestro calzado es atemporal, duradero, resistente y multifuncional.